29 de noviembre 2024
La criminalidad debe tener una alta prioridad en el nuevo gobierno.
En un artículo en la página 4 del Nuevo Día del pasado domingo 24 de noviembre la gobernadora entrante Jennifer González señala las características prioritarias que ella considera deben tener los candidatos a ocupar posiciones en su gobierno y señala la capacidad y disposición de ejecutar. Señaló también que la parte más importante para ella será la energía y la fiscalización de las alianzas público privadas.
Quiero por este medio respetuosamente recordarle a la próxima gobernadora que desde hace ya algún tiempo estamos experimentando en Puerto Rico una enorme ola de criminalidad a toda hora del día y de la noche. En la misma edición del periódico el ND en la página 18 en un titular: Tiroteos cobran siete vidas en solo dos días” se nos señala que ya van 437 asesinatos en lo que va de año, unos 12 más que los que había para la misma fecha el año anterior (2023). El mismo domingo fue asesinado a plena luz del día de un escopetazo un residente de Piñones.
Gran parte de estos crímenes están relacionados al tráfico de drogas y son cometidos por muchachos menores de edad. Aquí vale la pena señalar que de la totalidad de estudiantes que entran al sector de la educación pública en Puerto Rico sólo se gradúa de cuarto año alrededor del 50 %. Lo que significa que de ese 50 % que se va a la calle y un gran número de ellos va al negocio del tráfico de drogas pues les representa una manera rápida de lograr ingreso sustancial para sus necesidades.
En el artículo del Nuevo Dia el criminólogo Víctor García Toro señaló que muchos gatilleros son “menores porque son los que se atreven, los que se arriesgan y los que, de modo general, la Policía no consigue identificar inmediatamente”. Además, es necesario añadir que los adultos en el negocio del tráfico de drogas los seleccionan porque por ser menores no les aplica el sistema de justicia de los adultos. Tenemos una realidad que desafortunadamente contribuye
Continúa señalando García Toro “Los muchachos jóvenes que cometen crímenes son físicamente formados como adultos, pero mentalmente no lo son, porque no hay una relación directa entre la edad cronológica y la edad psicológica. Entonces, estos muchachos son atrevidos, pero no saben aquilatar las consecuencias de las acciones”, abundó.
El periódico Metro del lunes 25 de noviembre señala que el Negociado de la Policía de Puerto Rico (NPPR) informó en la tarde del domingo que sumaron a 10 los asesinatos durante el fin de semana. Esto ya es verdaderamente insostenible.
Tenemos una criminalidad que es cuatro veces mayor que la de los Estados Unidos. Los niveles de drogadicción entre nuestra población son alarmantes así como el tráfico de drogas, esto sin que tengamos los recursos humanos (una fuerza policiaca bien entrenada y paga) que pueda combatirlo efectivamente. Las balaceras por las guerras por el tráfico de drogas son prácticamente diarias como vemos en la prensa constantemente. Así las cosas, desgraciadamente nos hemos convertido en un importante suplidor de drogas para el este de los Estados Unidos para nuestro desprestigio.
La seguridad en nuestras calles en las ciudades y pueblos deja mucho que desear al extremo que gran parte de nuestra ciudadanía se siente desprovista de seguridad para salir y llevar a cabo sus funciones y después de las 6 pm se encierran en sus viviendas. Esto dice muy mal de la calidad de vida que tenemos los puertorriqueños.
El problema de la criminalidad es uno de los problemas que debería ser la más alta prioridad para la atención del próximo gobierno. Desde hace tiempo se debió haber tratado este problema con la urgencia y prioridad necesaria. En varias ocasiones he insistido que es necesario celebrar una cumbre gubernamental contra la criminalidad en la cual estén presentes tanto altos funcionarios del gobierno federal como local asi como de instituciones sociales y comunitarias. Esta cumbre debe llevarse a cabo ya. Jennifer González, nuestra próxima gobernadora, usted debe llevarla a cabo tan pronto asuma el poder.
¿Nos preguntamos por qué se va la gente de Puerto Rico? La gente se va porque somos un territorio del tercer mundo lleno de problemas y de demostrada incapacidad para resolverlos queramos o no admitirlo.
Gobernadora en su momento usted tiene que impartir órdenes a la policía para que resuelvan esta situación y si la policía no tiene la capacidad, actívense la Guardia nacional en las áreas que sea necesario hacerlo.
Ya es hora de utilizar la guardia nacional para ocupar los residenciales y lugares donde habitan estas gangas. Aunque esa no es la solución permanente puede constituir un detente en lo que se implantan medidas efectivas a más largo plazo. Lo que no puede suceder es dejarlo todo como está. Eso sería irresponsable.
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